La novillera Rocío Romero cortó una oreja
La localidad murciana de Moratalla ha recuperado esta tarde los festejos taurinos después de 14 años y lo ha hecho con una corrida de toros mixta que ha resultado triunfal. Los diestros Miguel Tendero y Filiberto han salido a hombros tras cortar dos orejas cada uno, mientras que la novillera Rocío Romero ha cortado una oreja.
FICHA:
Corrida de toros mixta, con motivo de las Fiestas del Santísimo Cristo del Rayo.
Se lidiaron cuatro toros y dos novillos toros de Jiménez Pasquau, de juego desigual
Miguel Tendero, una oreja y una oreja.
Filiberto, una oreja con aviso y una oreja con aviso
La novillera Rocío Romero, silencio y una oreja.
Media entrada sobre el aforo permitido.
Saludaron en banderillas Antonio Cama y Julián Carpio.
CRONICA:
Abrió plaza el torero manchego Miguel Tendero, que lidió un toro noble de Jiménez Pasquau que no anduvo sobrado de fuerzas y terminó por pararse. Tendero estuvo variado y dispuesto con la capa y después templó bien al toro con la muleta mientras duró, para terminar acortando distancias y desplantándose con él antes de matar de pinchazo y estocada entera. Paseó una oreja.
Al cuarto lo toreó con vibración a la verónica, llegando a los tendidos. La faena de muleta tuvo que acabar en la corta distancia, sacando con oficio muletazos de uno en uno de un animal que no colaboró. Una gran estocada puso en sus manos otra oreja que le abrió la Puerta Grande.
En el primero de su lote, Filiberto hizo lo más destacado de su faena al natural. Su voluntad de triunfo le hizo alargar el trasteo, sonando un aviso, pero el público agradeció el esfuerzo. Mató al segundo intento de estocada entera en buen sitio, cortando una oreja.
Lo mejor de la tarde se vio en el quinto, el toro que dio más juego y al que Filiberto cuajó en una completa actuación. Comenzó la faena rodillas en tierra, se lució al natural y remató con buenos pases de pecho. Terminó su faena soltando la ayuda y cambiándose la muleta por la espalda en terreno de cercanía. Mató de estocada pero usó el descabello y el premio quedó en una oreja.
Rocío Romero fue ovacionada al torear de capa al tercero de la tarde, con el que dejó detalles de buen gusto y pinturería en la faena de muleta, una labor que le habría valido una oreja de no fallar con el descabello.
El sexto se movió y Rocío Romero volvió a gustar al público con el capote. Con la muleta logró también ligar buenas series, componiendo una entonada faena. Mató de pinchazo y estocada y cortó una merecida oreja.
FOTOS: SOTOMAYOR / TOROMEDIA