Novillero prometedor que actuó en varias ocasiones en la Plaza Onubense en la década de los 50 y que, tras su retirada, siempre estuvo al lado de las jóvenes promesas a las que les ofreció sus enseñanzas y conocimientos.
Joselito Moreno debutó en el coso de sus tierras el 1 de abril de 1951 en una novillada de promoción en la que se lidiaron erales de Manuel Martínez Elizondro y compartió cartel con Manuel Gómez “Carnicerito”, Juan Pérez Recio, Manuel Bernárdez “Zerpa” y Luís Miguel “Mige”. No tuvo fortuna el debutante porque el sorteo le deparó el novillo más manso con el que estuvo muy voluntarioso, dejando algunos pases sueltos y matándolo con presteza. El público comprendió su actuación y le premió con una oreja con la que paseó el anillo.
Volvió a comparecer ante sus paisanos el 4 de agosto de 1952, día en el que actuó junto a Pepe Ordóñez y Rafael Jiménez “Chicuelo” en la lidia de novillos de José Escobar. Por cogida de José Ordóñez la corrida quedó en un mano a mano. Y el choquero consiguió un gran triunfo en el primero de su lote al que le realizó una faena muy artística con pases de todas las marcas para matar de media estocada y pasear los máximos trofeos. A su segundo le realizó una faena muy torera pero no estuvo acertado con los aceros y escucho un aviso y en el otro realizó otra buena faena que de nuevo estropeó con las espadas pues necesitó de varios intentos quedando todo en una fortísima ovación.
Compareció de nuevo ante sus paisanos el 17 de mayo de 1953 actuando con Antonio Borrero “Chamaco” y Paco García Vázquez en la lidia de erales de Diego Garrido. Gran triunfo de Joselito Moreno en el que abrió plaza al que realizó una gran faena que le sirvió para conquistar las dos orejas y el rabo. Volvió a estar bien en el cuarto, pero, de nuevo, mató mal y todo quedó en una fuerte ovación.
Este triunfo le sirvió para repetir el 4 de junio junto a Joselito Romero y Antonio “Chamaco” con ganado de Julia Cossio. Joselito construyó una gran faena a su primero y, pese a no matar bien fue galardonado con una oreja y fue empitonado por el segundo pasando a la enfermería donde fue asistido de una herida de 10 centímetros en la cara anterior del muslo derecho de pronóstico menos grave.
Actuó por tercera vez en la temporada el 6 de septiembre junto a Manolo Zerpa, Rafael Carbonell y Antonio “Chamaco”. Su entrada en el cartel se debió a la sustitución de Miguel Montenegro. Con ganado de Juan Belmonte y Pérez de la Concha. Joselito se mostró muy valiente con su primero, un animal que dio escasas facilidades para el lucimiento siendo muy ovacionado y estuvo voluntarioso y con ganas en el otro, pero falló con los aceros y escuchó un aviso.
Después llegaría la época del servicio militar en la que estuvo alejado del planeta taurino al que regresó en 1957 y el 7 de julio reapareció en Huelva junto a Isidro Alarcón “Litri II”, Fernando Moreno Casau y Manuel Ceada Vázquez para lidiar erales de José Carvajal. Joselito Moreno dejó muestra de su calidad con una bella faena que fue premiada con la vuelta al ruedo. En el otro superó las dificultades de su enemigo y fue muy aplaudido al concluir su actuación.
Nuevo parón en su carrera hasta volver a su tierra el 8 de septiembre de 1961, haciendo el paseíllo con Antonio Batalla y El Choquero y el rejoneador Clemente Espadanal para lidiar ganado de José María Soto de la Fuente. Joselito no tuvo fortuna en el sorteo, pues le tocó un lote imposible. No obstante, brilló el toreo con la mano izquierda ganándose merecidos aplausos, pero estuvo muy mal a la hora de matar y todo quedó en una gran ovación. El cuarto fue un manso de solemnidad y Joselito Moreno quiso lidiarlo con decoro y dignidad, pero el novillo no se paraba. El tiempo pasó y sonó un aviso. Fue silenciado. Fue su último paseíllo en su tierra.
Artículo de opinión de Vicente Parra Roldán.
