A lo largo de la historia mucho se ha discutido si la temporada taurina comienza el Domingo de Ramos o el de Resurrección. Voces autorizadas se apuntan a una u otra fecha sin que haya una uniformidad en la misma.
Por lo que respecta a nuestra ciudad, en algunas ocasiones se han celebrado festejos el Domingo de Ramos, como también se han llevado a cabo el de Resurrección. Pero, en general, no son fechas dentro del calendario onubense que, desgraciadamente, ha quedado circunscrito a las Colombinas.
En este artículo abordaremos los espectáculos celebrados el Domingo de Ramos y, en los últimos ochenta años, encontramos el primero el 15 de abril de 1962 y que fue un festival a beneficio de la Campaña de Navidad. Fermín Bohórquez rejoneó una res de su ganadería y los matadores de toros Miguel Báez “Litri”, que mató dos, Antonio Ordóñez, Manolo Vázquez y José Julio lo hicieron con astados de Celestino Cuadri. Fue una gran tarde de toros y toreros y todos los actuantes recibieron las orejas y el rabo.
Siete años más tarde, y ya en la Plaza Monumental, el 30 de marzo se celebró una corrida en la que tomaron parte Miguel Mateo “Miguelín”, Paco Camino y Santiago Martín “El Viti” para lidiar astados de Álvaro Domecq. Una tarde en la que los tres matadores no estuvieron bien.
El 23 de marzo de 1975 se celebró una novillada picada con reses de Sánchez Cobaleda, actuando Gabriel Puerta, Manuel Ruiz “Manili” y el onubense Miguel Conde. El de Cantillana fue el triunfador de la tarde al totalizar tres orejas, una en su primero y dos en su segundo. Puerta paseó el anillo en una ocasión al igual que el onubense Miguel Conde.
Al año siguiente se celebró un festejo que tuvo como novedad la presencia de Mari Cruz Gómez, Joaquina Eriza “La Algabeña” y Pepita Ríos ante erales de Víctor Colín. La triunfadora fue Pepita Ríos que le cortó las orejas a su primero, mientras que “La Algabeña” obtuvo un apéndice y Mari Cruz Gómez fue aplaudida en un festejo que contó con escasa afluencia de público.
Desde entonces para acá, el Domingo de Ramos no ha contado en el calendario taurino onubense. Las procesiones y las playas se han llevado el público que podría acudir a estos festejos.
Artículo de opinión de Vicente Parra Roldán