La corrida de Zalduendo, falta de bravura y sin clase, fue a menos en la muleta.
Este viernes de Colombinas se anunciaba en el coso de la Merced un cartel de lujo con Morante de la Puebla, Miguel Ángel Perera y Daniel Luque con un encierro de Zalduendo que tuvo que ser remendado con un toro de Albarreal. La tarde se estrelló con los toros de la divisa azul y grana y aunque Perera cortó una oreja, fue Morante quien dejó en La Vega Larga su impronta y quien sabe si de no haber marrado con la espada podría haber mantenido la racha de triunfos tras su reciente reaparición.
Tras el paseíllo, y antes de salir el primero de la tarde, sonó una cariñosa ovación que Morante en su regreso al sur tras su vuelta a los cosos, saliera a saludar, pero el genio de La Puebla del Río hizo oídos sordos, quizás porque anda con hambre de torear y quería que el toro saliera cuanto antes, y así cuando salió el primero de Zalduendo el torero cigarrero lo recibió con tres verónicas, que fueron una caricia, llevándolo muy despacio y a compás. En la muleta, con mucha torería, lo toreó muy despacio con la mano derecha, pero el toro estaba muy justito de fuerzas y le faltaba transmisión en su embestida. Fue muy jaleado el torero con la mano izquierda y tras un excelso toreo a dos manos, se cobró un pinchazo y una estocada trasera, siendo ovacionado tras una minoritaria petición de oreja.
Lo mejor de la tarde, llegó en la faena de muleta del cuarto, quizás el mejor de los toros de Zalduendo, al que Morante-más torero que artista- toreó con mucha profundidad primero con la mano derecha y después con unos extraordinarios naturales, llenos de pureza, citando a pies juntos. Tras un pinchazo y una estocada se pidió la oreja con fuerza, que no fue atendida por la Presidencia. Morante salió a saludar y no quiso dar la vuelta al ruedo que le era solicitada por el público.
Una oreja cortaría Migue Ángel Perera al toro de Albarreal que remendaba la corrida, al que toreó con temple y a media altura, y con el que el torero de la Puebla de Prior se pegaría un arrimón. El astado de Albarreal había salido con cierta movilidad, pero acusó la falta de raza al final de la faena y con el que acabaría de un espadazo.
Con el quinto poco pudo hacer, un animal desclasado y falto de casta que terminaría rajándose y con el que el público le pidió que abreviara y con el que había iniciado su faena con un pase cambiado por la espalda. Tras un espadazo tardó en caer por lo que necesitó de un golpe de verduguillo y terminó saludando desde el tercio tras escuchar un aviso.
El peor lote de la tarde se lo llevó Daniel Luque, en su primero, el torero estuvo muy por encima de la condición de su oponente, un toro que al principio no tenía fijeza en los engaños, pero al que Luque, con su técnica acabó metiendo en la muleta. Tras un estocada trasera no tuvo petición mayoritaria y saludaría desde el tercio. Ante el sexto, un toro sin clase y falto de lucimiento Daniel Luque no pudo más que abreviar siendo silenciado.
Los toros de Zalduendo hicieron bueno el dicho de corrida de expectación tarde de desilusión.
Resumen del festejo
4º festejo de abono de las Fiestas Colombinas. Corrida de toros.
Tres cuartos de entrada.
Cinco toros de Zalduendo, y uno de Albarreal, lidiado en 2º lugar.
Morante de la Puebla, de celeste y oro: ovación tras petición y ovación tras petición.
Miguel Ángel Perera, de verde menta y oro: oreja tras aviso y ovación tras aviso.
Daniel Luque, de fucsia y oro: ovación y silencio.
CUADRILLAS: Saludaron en el primero Curro Javier y Alberto Zayas tras parear al primero, y Joao Ferreira y Alberto Zayas tras banderillear y Curro Javier por la brega al cuarto. En el sexto, saludó Iván García tras banderillear.
Crónica por José Luis Trujillo del Real