Unas Colombinas con muchas luces y leves sombras

En la Vega Larga por José Luis Trujillo del Real

Con las últimas luces del pasado domingo se cerraron las puertas de la Plaza de la Merced y con ellas los festejos taurinos por las Fiestas Colombinas, que ha sido una Feria con muchas luces pero con alguna que otra sombra que nos disponemos a abordar.
En el plano de los matadores de toros, el gran triunfador de las Colombinas ha sido David de Miranda, como era lúcido resolver, tras su encerrona del pasado 1 de agosto. En dicha corrida cortó siete orejas -dos simbólicas- e indultó a Barba Verde, un gran toro de José Luis Pereda, pero este hito no debe de olvidar la actuación del triguereño ante el exigente toro de Loreto Charro corrido en segundo lugar.

Dentro del plano de matadores debemos recordar a Roca Rey, que cortó cuatro orejas -de diferente peso- de sus dos oponentes abriendo la Puerta Principal de la Merced, ni los momentos que nos regalaron Perera y Juan Ortega así como Morante, que en su tercera corrida tras la reaparición de Santander, merece una mención aparte, pues de haber entrado la espada no sabemos lo que hubiera pasado tras las dos faenas del cigarrero con ambas peticiones de oreja.

En lo que respecta a los rejones es Diego Ventura, sin duda el rejoneador más importante del siglo XXI, el gran triunfador de estas Colombinas en la que ha cortado cinco orejas debiendo de destacar la gran faena al quinto de la tarde del pasado domingo.

De los novilleros con caballos, el triunfador es el sevillano Javier Zulueta que estuvo sensacional el día 31 de julio cortando tres orejas y tampoco debemos de olvidar la novillada sin caballos de la III Edición de Huelva es Torera:” Objetivo, La Merced” cuyo triunfador fue Julio Méndez.

De las cuadrillas debemos de destacar a Curro Javier y a Javier Ambel, tanto con los palos como con la brega.

En cuanto al apartado ganadero, la cara de la moneda viene marcada por el indulto de Barba Verde de Pereda, pero tampoco podemos de dejar pasar el buen juego de la novillada de este hierro y hay que destacar la buena presentación, un punto por encima de lo acostumbrado en La Merced, de la mayoría de las corridas, excepción hecha de la corrida de Zalduendo y del toro de Santiago Domecq, cuyos pitones no estuvieron a la altura de la corrida y deslucieron todo lo que atesoraba en su embestida.

Los criterios del palco, es otra cuestión a tratar en este balance de las Colombinas, Huelva es plaza de 2ª, y ya se sabe que la primera oreja es por la petición mayoritaria del público y la segunda es decisión de la autoridad, pero no pueden darse orejas de portátil, como las de Talavante o Juan Ortega.

Por otro lado, hay que destacar la mejora en la afluencia de público, con mucha gente joven y las dos entradas que rozaron el lleno, la del día 3 de agosto con Roca Rey en el cartel y la de los rejones. Comentaban del incremento de abonados y de ser así, hay que felicitar a la empresa porque ese es el camino para el fomento de la afición y que las Colombinas brillen aún más.